Hay muchas agencias de viajes que ofrecen ofertas muy económicas, pero ello conlleva que muchas veces no ofrezcan un servicio de calidad, con transportes incómodos o en mal estado, alojamientos poco limpios, sin agua caliente, baños compartidos, grupos masificados con itinerarios rígidos y poco tiempo para disfrutar de los lugares y sus gentes, guías que no hablan español…
Desde Venamarruecos tenemos el compromiso de intentar que cada viaje sea una experiencia única llena de buenos recuerdos y gratas sensaciones, por lo que todas nuestras rutas se realizan en transporte cómodo, en perfecto estado y con aire acondicionado, chóferes con gran experiencia y los alojamientos a elegir pueden ser de tipo estándard o de lujo, siendo el alojamiento estándard siempre lugares con encanto, limpios, con aire acondicionado y baño privado. Además, al ser rutas personalizadas, se puede parar cuando os apetezca y disfrutar del viaje a vuestro ritmo, sin prisas ni presiones por tener que acoplarse a un horario o grupo. Y todo ello al mejor precio posible, ajustándolo según la temporada, número de viajeros, tipo de alojamientos, lugares y actividades a realizar, etc.
Les deseamos un ¡MUY FELIZ VIAJE POR MARRUECOS!
Cada programa se diseña basándose en sus necesidades e intereses para convertirlo en una experiencia memorable. El procedimiento es muy sencillo.
1 - Contacto. ¿Qué tipo de experiencia desea realizar? Lugares a visitar, número de personas, fechas y duración, etc.
2 - Propuesta a medida. Creamos un programa a su medida, incluyendo diferentes actividades relacionadas con gastronomía, arte, cultura e historia y experiencias a realizar por tierra, mar y aire.
3 - Comunicación. Nos da su opinión e impresiones. Trabajaremos conjuntamente para dar con la propuesta perfecta.
4 - Confirmación. Una vez confirmado el programa, empezamos a organizar y gestionar cada detalle del mismo. ¡Usted solo tiene que sentarse y disfrutar de la experiencia!
Es necesario el pasaporte en regla con validez mínima de 6 meses desde la entrada a Marruecos. Los europeos no necesitan visado. La permanencia máxima legalmente autorizada es de 3 meses desde la entrada a Marruecos.
Marruecos está en la franja horaria de Greenwich y no se hace cambio de hora en primavera y otoño. Respecto a España, en Marruecos es 1 hora menos en invierno, y 2 horas menos en verano.
No es necesario vacunarse. En las farmacias se encuentran los mismos medicamentos que en Europa. Por el contrario, en zonas de difícil acceso los servicios sanitarios y medicamentos prácticamente son inexistentes.
Debido a su geografía, costa atlántica, costa mediterránea, baja montaña, alta montaña, estepa, desierto, en Marruecos se encuentran todos los climas. En general tiene un clima cálido excepto diciembre, enero y febrero que son los meses más fríos del año. En el desierto durante el mes de agosto alcanzan temperaturas de hasta 50º.
La moneda del país es el Dírham. El cambio aproximadamente es de 1€ = 11DH. En España, los consulados marroquíes disponen de sucursal bancaria donde cambian € por DH. Lo más cómodo es cambiar en el aeropuerto marroquí y una vez viajando por Marruecos en sucursales bancarias en cascos urbanos. En algunos hoteles y posiblemente en algunas ciudades se puede pagar con tarjeta de crédito.
Gafas de sol, crema protector solar, crema protector anti mosquitos, crema labial, jabón, pañuelos de papel, ibuprofeno, aspirinas, laxantes, astringentes (sólo por si acaso), calzado cómodo, chancletas, chaqueta para el frío de las noches, pilas para aparatos que las requieran (en África las pilas son de muy mala calidad).
Los viajeros de otros países sólo deben beber agua mineral embotellada. El té verde es la bebida nacional y a veces se prepara a la menta. Forma parte de la tradición y es todo un ritual para celebrar la bienvenida al recién llegado. Lo llaman el whiskey berebere y se sabe que está bien preparado por su turbante de espuma.
Los platos nacionales son el Tagine, estofado de verdura y carne y el Cuscús, sémola de trigo cuidadosamente cocinada al vapor de un exquisito estofado de verduras y carne. El secreto principal de todo la cocina es la especial selección de la gran variedad de especias que existen en la cocina marroquí.
El Pan es un incondicional, está presente en todas las comidas. En las zonas rurales cada familia dispone de un horno de piedra o de barro donde hornea el pan amasado cuidadosamente, para comerlo recién hecho.
La Harira es la sopa de Ramadán, mezcla nutritiva de pasta, arroz, sémola verduras y especias y cilantro de fuerte sabor.
A la hora de comprar no hay que olvidar que Marruecos está en vías de desarrollo por lo que todo es un poco más económico que en Europa.
Aún hoy se comercializa como antiguamente con trueques, intercambiando objetos o comida.
Los zocos son los mercados donde se puede adquirir casi de todo, una explosión de olores y colores. También es habitual el regateo, para comprar hay que negociar el precio con el vendedor con habilidad y si sin abusar. La idea es empezar con un poco menos del precio que pagarías por el objeto deseado y a partir de allí el vendedor hace una contraoferta empezando el habilidoso juego del regateo hasta llegar a un acuerdo.
Algunos productos típicos son el agua de azahar, agua de rosas, aceite de argán, almizcle, dátiles, cuscús, harissa (salsa muy picante), alfombras, pañuelos estampados, turbantes, accesorios de plata, chilabas, babuchas, fósiles y cuarzos extraídos en el país, artesanía berebere y árabe, cerámica, telas, instrumentos musicales (djarbuca, castañuelas gnawa…), gran variedad de especias, como el azafrán, cardamomo, comino… tan valiosas en la antigüedad que se usaban como moneda de cambio en las rutas trans-saharianas.